La prostatitis es una de las enfermedades inflamatorias más comunes del sistema genitourinario masculino, en la que se ve afectada la glándula prostática. Muy a menudo, esta enfermedad se detecta en hombres que tienen una vida sexual activa.
La mayoría de las veces, la inflamación de la próstata es de naturaleza infecciosa, pero hay excepciones. Si no se trata, dicha patología puede provocar daños secundarios en los testículos, la vejiga, los riñones, etc. En este artículo hablaremos sobre qué medicamentos se usan para la prostatitis.
Para empezar, notamos que el uso de cualquier medicamento solo es posible según las indicaciones de un médico. La automedicación de la prostatitis es inaceptable.
Medicamentos antibacterianos
En el caso de que la inflamación de la glándula prostática esté asociada con una flora bacteriana, se prescriben antibióticos, seleccionados en función de la sensibilidad del patógeno.
En este caso se pueden utilizar fluoroquinolonas, penicilinas, cefalosporinas y otros grupos de agentes antibacterianos.
En 2016, científicos de la Universidad de la Amistad de los Pueblos publicaron un artículo cuyos resultados encontraron que las fluoroquinolonas son los fármacos de elección en el tratamiento de la prostatitis crónica, debido a su eficacia y seguridad.
bloqueadores alfa
En presencia de trastornos de la micción en el contexto de la prostatitis, al paciente se le prescriben bloqueadores alfa.
Al bloquear los receptores alfa-1-adrenérgicos en los tejidos de la próstata, la uretra y la vejiga, estos medicamentos reducen la presión en la uretra, reducen la resistencia al flujo de orina y normalizan la micción.
El uso de drogas está prohibido en caso de hipersensibilidad, violaciones graves de las funciones de los riñones y el hígado, hipertensión ortostática en la historia.
remedios de hierbas
Como parte del tratamiento complejo de la prostatitis, también se pueden usar una variedad de preparaciones a base de hierbas.
Uno de los representantes son las tabletas y el extracto oral a base de hierba de San Juan y vara de oro, raíces de regaliz, rizomas de equinácea.
Según los fabricantes, este medicamento tiene un efecto antiinflamatorio y analgésico, mejora la microcirculación en los tejidos de la glándula prostática y normaliza la micción. También tiene actividad antimicrobiana contra la flora estafilocócica y estreptocócica, enterococos.
La principal indicación para el uso de este medicamento es la prostatitis crónica inespecífica.
Como contraindicaciones, se acostumbra considerar la hipersensibilidad individual y la glomerulonefritis aguda.
Métodos no farmacológicos
Además de las drogas, varios métodos no farmacológicos se usan ampliamente para tratar la prostatitis. Éstos incluyen:
- masaje de próstata;
- terapia con láser;
- terapia de ultrasonido;
- Estimulación eléctrica y más.